UN TRISTE FINAL PARA EL HERMOSO CANTERO DEL PORTERO

Se acuerdan que les había contado que el portero de casa no me miraba bién desde que corté unos gajitos de la planta de la vereda que él cuidaba y regaba con tanto orgullo?
Pués lo mio no fue nada,un detalle nomás!
Desde la municipalidad vinieron unos hombres con gorras y delantales color verde fluo,que comenzaron a arrancar todos los canteros de plantas que rodeaban los árboles de todo el barrio!
Parece que la órden (sin sentido),es que los árboles estén rodeados del mismo pasto,todos iguales.
No se para qué,como no se para qué hacen tantas otras pavadas los políticos.
en lugar de ocuparse de las veredas rotas,quitan lo único bello que alegraba las calles.
Hace poco un anciano casi se mata al lado de mi casa,por tropezar!
En fin,yo que tan preocupada estaba de haber tomado dos o tres gajos de las plantas,y ellos que vinieron con martillos y mazas a arrancar todo el cantero.
Las plantas muertas yaciendo en la vereda,desordenadas y cubiertas de tierra y piedras.
Quise salvar algunas.
Es más,el portero me miró como diciendo: _ ahora si,agarrate cuantas quieras.
Me arrodillé ante la vista de los asesinos de canteros,y corriendo con delicadeza las piedras y la tierra,tomé algunos pequeños gajos.
Me los hubiera llevado todos,todos los de la cuadra,pero ya no tengo más frascos ni vasos vacios donde poner a flotar las pequeñas plantas.
Tanto empeño en algo inutil,y en la esquina hace falta con urgencia un semáforo que evite los choques cotidianos.
Nunca entenderé a los políticos.
Creo que todos viven en la luna.