Llegué empapada por la lluvia torrencial que cae en Buenos Aires.
Es una lluvia espesa,que no deja ver más allá ni más acá de uno.
Obviamente me mojé aún llevando paraguas y al cruzar las calles tuve que meter mis queridos zuecos de plataforma dentro del agua.
Horrible meter los pies en el agua fria con zapatos!
Los jeans "Oxford" aún arremangados se me empaparon!
El pelo ni hablar,chorreando.
Nunca falta algún tonto que pasa rápido con el auto,salpicando a los que caminamos al más puro estilo "Carrie Bradshaw" de Sex and the City.
Ahora por fin estoy en casa mirando por la ventana.
Me encanta mirar por la ventana cuando llueve aunque hoy me angustia.
En poco tiempo comenzaran a informar que por aquí y por allá el agua volvió a hacer estragos en las casas y las calles y eso me impide disfrutar de la lluvia tras el cristal,que es como me gusta la lluvia.
Hay gente que adora caminar bajo la lluvia,yo no.
Me encanta verla y olerla pero sin mojarme.
Verla me hipnotiza.Me puedo quedar largo tiempo sin pensar (qué alivio!),viendo la lluvia caer.
Olerla también me gusta.Ese aroma previo a la tormenta,mezcla de pasto y agua o quien sabe mezcla de qué ya que por aquí pasto no hay!
Sentirla no.
Detesto mojarme vestida.
Incluso tuve una experiencia de estar caminando por la playa y que me agarre una tormenta por sorpresa y tener puesta la malla nada más.
Fue espantoso.
Me moría de frio y solo tenia mis brazos para abrigarme.
Caminaba rapidamente para regresar al punto de salida y agarrar mis cosas,pero el agua era una cortina espesa,como la de ahora,y casi no podía avanzar! Fue una fea experiencia.
Así que la lluvia tras la ventana.
La lluvia con una taza de café.
La lluvia con abrigo.
Ahora estoy disfrutando un poco de su sonido de oso gruñón, su gris casi humeante,su intensidad frenética.
La lluvia es muy especial porque nos obliga a mirar hacia adentro.
Adentro de casa o adentro de uno.
Y también nos enseña a esperar.
Tantas cosas se pueden esperar!
Desde que comienza el primer trueno ya empezamos a esperar: esperamos otro,esperamos la primer gota,que aumente el caudal,que llueva ya a raudales.
Después esperamos que llueva menos,que pare.
Esperamos que las nubes den paso a un tímido rayo de sol,tal vez a un arco iris.
Esperamos que las veredas se sequen y poder salir nuevamente a la calle.
Pero esta lluvia de hoy no da muestras de querer parar,por el contrario!
Tendré que seguir acompañándome y mirando hacia adentro.
Adentro de mi casa y adentro mio.
Afuera la lluvia como una maestra que obliga a reflexionar.